Dieta mediterránea: contrarresta la atrofia del cerebro y lo rejuvenece 5 años

Los beneficios de la dieta mediterránea no se refieren solo al sistema cardiovascular, la diabetes o la obesidad. Según un nuevo estudio, seguir una alimentación rica en fruta, verdura, pescado, legumbres y pobre en carne, podría también obstaculizar la atrofia del cerebro y el envejecimiento cognitivo en los ancianos. El consumo de los alimentos típicos de la dieta mediterránea è de hecho asociado a un mayor volumen cerebral, equivalente al de un cerebro 5 años más joven, respecto al de individuos que no siguen este régimen alimentario.

La investigación, publicada en Neurology, la revista médica de la American Academy of Neurology, è stata condotta dai ricercatori della Columbia University di New York (USA).

Las características de la dieta mediterránea 

El modelo nutricional mediterráneo se inspira en las tradiciones alimentarias de los países que se asoman al mar Mediterráneo, principalmente Italia, Grecia, España y Marruecos. La dieta mediterránea tradicional privilegia el consumo de alimentos de origen vegetal y è caracterizada por la abundancia de verduras, cereales, legumbres, pescado, fruta, frutos secos y por el aceite de oliva como fuente primaria de grasas. 

Prevé en cambio un consumo moderado de carne, lácteos y huevos, y un consumo modesto de vino durante las comidas. Un régimen alimentario, por tanto, caracterizado por un bajo contenido de ácidos grasos saturados, rico en carbohidratos y fibra, y por el alto contenido de ácidos grasos importantes por su función antiinflamatoria. 

La dieta mediterránea no è solo un’insieme de alimentos, sino que prevé la elección de productos frescos, seleccionados en base a la estacionalidad y a la disponibilidad local. Este estilo alimentario promueve el uso de productos típicos y protege las tradiciones gastronómicas locales. En los últimos años la dieta mediterránea è stata molta estudiada en relación a sus numerosos beneficios sobre la salud, en particular para la prevención de enfermedades crónicas. 

La alimentación de tipo mediterráneo ejerce de hecho una acción protectora sobre el corazón, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares, y contrarresta l’obesità, la diabetes, el colesterol alto y l’ipertensione. Según estudios recientes, también ayudaría a combatir algunas enfermedades neurológicas como l’Alzheimer, y el deterioro de las capacidades cognitivas, típico del proceso de envejecimiento.

Comer más pescado y menos carne para menos encogimiento cerebral

El objetivo de los investigadores de la Columbia University, dirigidos por Yian Gu, è stato quello di verificare se la maggiore adesione alla dieta mediterranea era legata alla grandezza del cervello e al mantenimento delle sue dimensioni durante il processo di invecchiamento. Según los investigadores, la adhesión al régimen alimentario mediterráneo debía respetar al menos cinco características de las nueve que describen dicha dieta. Estudiando a los sujetos ancianos, el equipo demostró que aquellos que seguían un estilo mediterráneo, tenían el cerebro más grande que quienes no lo seguían, con una diferencia equivalente a cinco años de envejecimiento. 

En particular, los volúmenes de la materia gris y de la materia blanca del cerebro eran, respectivamente, de 5 y 6 mililitros mayores que los medidos en los sujetos que no seguían la dieta mediterránea. La dieta mediterránea tomada en consideración en este estudio incluía un elevado aporte de cereales, verduras, legumbres, fruta, nueces, aceite de oliva, y un escaso consumo de alimentos de origen animal con excepción del pescado, componente importante de este tipo de alimentación. 

En los sujetos en estudio, el consumo de al menos 100-150 gramos de pescado cada semana, y no más de 100 gramos de carne al día, causaban una notable reducción de la pérdida de células cerebrales, cuantificable en cerca de tres o cuatro años de envejecimiento. L’aumento de la cantidad de pescado y la reducción del consumo de carne podrían ser los 2 elementos nutricionales fundamentales a los que se deben los beneficios de la dieta mediterránea sobre la estructura del cerebro.

Algunos detalles de un trabajo complejo

El estudio involucró a 674 personas con una edad media de 80 años, no afectadas por demencia, que completaron cuestionarios alimentarios sobre la dieta seguida durante el año anterior. El equipo de investigadores escaneó luego, mediante resonancia magnética, el cerebro de más de 650 de las personas seleccionadas. Los participantes fueron divididos en dos grupos según cuánto sus hábitos alimentarios eran afines o no a los principios de la dieta mediterránea. Los sujetos que habían seguido más estrictamente el estilo alimentario mediterráneo mostraban un volumen total del cerebro de 13,11 mililitros mayor respecto a los sujetos del otro grupo. Como observó el doctor Gu, el estudio no prueba directamente que la dieta mediterránea prevenga el encogimiento cerebral, pero muestra l’esistenza de una asociación que deberá ser aún estudiada.

Más alimentos mediterráneos, menos envejecimiento

En conclusión, estos resultados demuestran que en los adultos mayores, l'adesione a la dieta mediterránea è asociada con una menor atrofia y menor pérdida de volumen cerebral, haciendo a estos sujetos “más jóvenes” en 5 años respecto a aquellos de igual edad que no siguen el régimen alimentario mediterráneo. Según los investigadores, estos resultados son entusiasmantes, ya que plantean la posibilidad de que se pueda ralentizar el encogimiento cerebral y los efectos del envejecimiento simplemente siguiendo una dieta sana rica en fruta, verdura y pescado. 

Fuente: Yian Gu, et al. “Mediterranean diet and brain structure in a multiethnic elderly cohort” Published online before print October 21, 2015 Neurology .