La suplementación con omega-3 de aceite de pescado puede retrasar el envejecimiento biológico
Suplementos de ácidos grasos omega 3: una ayuda contra el envejecimiento
Un descubrimiento sorprendente demuestra que reducir la relación entre los omega 6 y los omega 3 en el organismo mediante la suplementación con aceite de pescado de alta dosis podría ralentizar el envejecimiento celular y en un 15% el estrés oxidativo en adultos sanos. A destacar este nuevo efecto de los ácidos grasos omega-3 presentes en el aceite de pescado es una investigación publicada por Janice Kiecolt-Glaser y sus colegas de la Ohio State University (Columbus, Estados Unidos) en la revista Brain, Behavior, and Immunity.
Los telómeros, un indicador del envejecimiento biológico
Los investigadores estadounidenses consideraron como indicador del envejecimiento la longitud de los telómeros, es decir, la parte terminal de los cromosomas que contienen el ADN de las células.
Diversas investigaciones han demostrado que en caso de patologías asociadas al envejecimiento estas estructuras son más cortas de lo normal. No solo eso, telómeros más cortos están asociados a estilos de vida poco saludables y a una mortalidad precoz. Este estudio se centró en su longitud en los glóbulos blancos de individuos que tomaron diariamente durante 4 meses 2,5 gramos o 1,25 gramos de los Omega-3 EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexaenoico) en una proporción de 7:1. Este parámetro se comparó con la longitud de los telómeros en personas que, en cambio, consumieron una mezcla representativa del consumo medio de grasas en la dieta típica estadounidense. Considerando simplemente la cantidad de Omega-3 consumidos, los investigadores no encontraron una diferencia significativa en la longitud de los telómeros entre los diferentes individuos que participaron en el estudio.
Sin embargo, centrando la atención en la relación entre Omega-6 y Omega-3, se observó que valores más bajos (asociados, por tanto, a cantidades más elevadas de Omega-3) están asociados a telómeros más largos. Resultados similares se obtuvieron también analizando la actividad de la telomerasa, la enzima de la que depende la longitud de los telómeros. En conjunto, estos datos indican que cuanto más baja es la relación Omega-6/Omega-3, menor es el envejecimiento celular.
Omega-3 y Omega-6: dos efectos contrapuestos Los resultados obtenidos reafirman cuán importante es garantizar una alimentación que mantenga los niveles de Omega-6 y Omega-3 en un equilibrio óptimo. De hecho, aunque en ambos casos se trata de ácidos grasos esenciales para el organismo, su acción es en su mayor parte opuesta, y mientras que en la mayoría de los casos los Omega-6 promueven los fenómenos inflamatorios, los Omega-3 tienen un pronunciado efecto antiinflamatorio. Desafortunadamente, las dietas occidentales modernas son particularmente ricas en Omega-6. Muchos expertos creen que el aumento en el consumo de estos ácidos grasos en detrimento de los más saludables Omega-3 es al menos en parte responsable del aumento de ciertas patologías como, por ejemplo, las enfermedades cardiovasculares. Los resultados de este nuevo estudio han reiterado que un enfoque orientado a reducir la relación entre Omega-6 y Omega-3 basado en el aumento del consumo de estos últimos puede ser eficaz para mejorar el estado de salud. No solo eso, Kiecolt-Glaser comentó el descubrimiento de la influencia de los Omega-3 sobre la longitud de los telómeros subrayando que respalda la hipótesis de que la ingesta de suplementos alimenticios puede realmente influir en los procesos de envejecimiento.
Antienvejecimiento y antiinflamatorios Además del efecto protector contra el acortamiento de los telómeros, los investigadores descubrieron que ambas dosis de Omega-3 probadas reducen en aproximadamente un 15% el estrés oxidativo, un factor asociado a diversos trastornos, incluidos los cardiovasculares y los neurodegenerativos. Estos resultados se suman a los obtenidos anteriormente por los mismos investigadores, que demostraron que el consumo de Omega-3 es eficaz para reducir los niveles de inflamación, otro factor importante en la determinación del estado de salud. Con base en todas estas evidencias, los autores concluyeron que los suplementos de Omega-3 podrían representar un caso raro en el que una sola intervención nutricional puede ayudar a reducir el riesgo de diversas patologías asociadas al envejecimiento: desde las enfermedades coronarias hasta la diabetes, pasando por el Alzheimer.
Fuente:
Kiecolt-Glaser JK, Epel ES, Belury MA, Andridge R, Lin J, Glaser R, Malarkey WB, Hwang BS, Blackburn E, “Omega-3 fatty acids, oxidative stress, and leukocyte telomere length: A randomized controlled trial”, Brain Behav Immun. 2012 Sep 23. pii: S0889-1591(12)00431-X. doi: 10.1016/j.bbi.2012.09.004. [Epub ahead of print]



