Cáncer de mama: Los omega-3 combaten el cansancio y la fatiga post-enfermedad
Cáncer de mama: menos fatiga post enfermedad con suplementos de aceite de pescado
La sensación de cansancio y fatiga sentida por las mujeres que han superado el cáncer de mama puede combatirse con una alimentación basada en Omega-3. Así lo demuestra un estudio realizado por la doctora Rachel Ballard-Barbash, del National Cancer Institute estadounidense. Los resultados han sido publicados en el Journal of Clinical Oncology. La autora explica que el aporte de ácidos grasos Omega-3 aumenta las reservas de energía diarias y atenúa la sensación de cansancio, pesadez y fatiga producida por una terapia oncológica. Este estado de malestar puede, de hecho, persistir incluso años después del fin de un tratamiento médico. Los Omega-3 se encuentran en alta concentración sobre todo en el pescado:
- salmón
- caballa
- sardinas
- anchoas
- arenques
- atún
- fletán
- pez espada
- trucha de arroyo
- semillas y aceite de lino
- nueces y cereales
- vegetales de hoja verde
- legumbres
- algas
Fatiga cáncer de mama/alimentación Omega-3: el estudio
La relación "consumo de Omega-3/disminución de fatiga" fue aclarada con un estudio sobre 633 pacientes que sobrevivieron al cáncer. En total, el 42% de ellas declaró sentir síntomas de fatiga y agotamiento incluso 3 años después del final de las terapias. Las pacientes que en cambio consumieron más Omega-3, en particular cápsulas de aceite de pescado, afirmaron haber sentido una menor sensación de malestar (solo el 23% no constató mejoras particulares).
Cáncer de mama: Omega-3 para mejorar la calidad de vida
Este estudio abre nuevos escenarios sobre el papel de la alimentación saludable, en particular con alimentos que contienen Omega-3, como remedio para el agotamiento y la fatiga post enfermedad que experimentan las pacientes. "Es necesario comer pescado al menos 2 veces por semana", especificó la doctora Ballard-Barbash al final de su intervención. A esto deben sumarse ejercicio físico realizado de forma regular y descanso. Esta investigación añade también otra pieza al panorama de los beneficios de los Omega-3 para el cáncer de mama.



