El mercurio en el pescado durante el embarazo aumenta el riesgo de TDAH en los niños.
Suplementos de Omega 3 en el embarazo: lo mejor del pescado, sin los riesgos de una intoxicación por mercurio
El desarrollo del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) podría estar asociado a una exposición del niño al mercurio contenido en el pescado consumido por la madre durante el embarazo. Sin embargo, comer pescado durante la gestación es importante porque los Omega 3 presentes en este alimento ejercen importantes beneficios sobre el desarrollo del feto, primero, y del niño, después. Un estudio del Brigham and Women's Hospital de Boston (Estados Unidos), publicado en los Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine, revela lo que podría parecer un círculo vicioso inevitable.
Afortunadamente, existen diversas maneras de beneficiarse de los efectos positivos de los Omega-3 evitando el peligro de ingerir dosis excesivas de mercurio. Por un lado, las mujeres embarazadas deberían limitar el consumo de pescado a no más de dos porciones por semana y evitar los pescados que pueden acumular cantidades excesivas del metal; por otro lado, existen fuentes alternativas de Omega-3 que no presentan los mismos riesgos del pescado: los suplementos de calidad farmacéutica.
Omega-3, aliados para un embarazo exitoso
Diversos estudios en el pasado han demostrado que durante el embarazo el consumo de Omega-3 y de pescados que los contienen en grandes cantidades promueve tanto la salud materna como la del bebé. De hecho, estos nutrientes son importantes para garantizar el correcto desarrollo del sistema nervioso del feto. Sin embargo, su acción no se limita a esto. Los hijos de mujeres que consumen grandes cantidades de Omega-3 también están expuestos a un menor riesgo de desarrollar eccemas, alergias y procesos inflamatorios. Por último, quienes han recibido estos valiosos nutrientes ya en el vientre materno parecen tener un coeficiente intelectual más alto y una probabilidad menor de desarrollar TDAH. Por otra parte, los Omega-3 favorecen el buen desarrollo del embarazo, reduciendo el estrés oxidativo, las muertes perinatales y las convulsiones neonatales.
¿Sí o no al pescado en el embarazo?
Para garantizar un correcto aporte de omega 3 es posible confiar en sus principales fuentes alimentarias, es decir, los pescados grasos como las anchoas y las sardinas. Por este motivo, los expertos recomiendan a las mujeres embarazadas comer al menos dos porciones de pescado por semana. Sin embargo, esta nueva investigación subraya lo peligroso que puede ser el pescado. El análisis de los niveles de mercurio presentes en las madres durante el embarazo, estrechamente relacionados con el consumo de pescado, ha revelado que sus hijos desarrollaron con mayor frecuencia el TDAH cuanto más alta era la cantidad de mercurio.
En realidad, el problema podría ser aún más grave, ya que estudios anteriores han sugerido que la exposición al mercurio también podría estar relacionada con el desarrollo de trastornos del espectro autista, microcefalia, retrasos en el desarrollo, ceguera y convulsiones. Aun así, el pescado no puede ser eliminado durante la gestación porque también aporta nutrientes muy importantes, entre ellos, como se ha dicho, los Omega-3. La recomendación de los expertos sigue siendo no superar las dos porciones por semana y evitar los pescados que podrían acumular las mayores cantidades de mercurio, como el tiburón, el pez espada, la caballa y el atún fresco.
Solo suplementos de aceite de pescado purificado
Otra posibilidad para esquivar el problema es tomar suplementos de aceite de pescado purificado que cumplan con los estándares internacionales en cuanto a la presencia de contaminantes. Leyendo atentamente la etiqueta del producto y comprobando la existencia de eventuales certificados de análisis de laboratorios externos como, por ejemplo, IFOS, es posible asegurarse de adquirir suplementos que no contengan dosis peligrosas de mercurio u otros contaminantes.
Fuente Sagiv SK, Thurston SW, Bellinger DC, Amarasiriwardena C, Korrick SA, “Prenatal Exposure to Mercury and Fish Consumption During Pregnancy and Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder-Related Behavior in Children”, Arch Pediatr Adolesc Med. 2012 Oct 8:1-9. doi: 10.1001/archpediatrics.2012.1286



