¿Suplementos de DHA durante el embarazo? Los niños estarán más atentos.

¿Suplementos de DHA en el embarazo? Los niños tendrán más capacidad de prestar atención

Las mujeres que durante el embarazo consumen 400 miligramos de suplementos de DHA al día favorecen la función cognitiva y la capacidad de atención de sus hijos, en edad preescolar. A la edad de 5 años, de hecho, los niños cuyas madres recibieron DHA durante la gestación muestran una mayor concentración, en comparación con los nacidos de mujeres que no siguieron la suplementación.

Así lo informa una investigación publicada en la revista American Journal of Clinical Nutrition, realizada por un equipo de investigadores internacionales y dirigida por Usha Ramakrishnan de la Emory University de Atlanta (EE. UU.).

DHA: omega-3 fundamental en el sistema nervioso

El sistema nervioso central es rico en omega 3 y omega-6, en particular en DHA y, en menor medida, en ácido araquidónico (AA). El DHA desempeña un papel muy importante en la retina y en las sinapsis, donde modula la síntesis, el transporte y la liberación de neurotransmisores. Este omega-3 realiza una función fundamental en el crecimiento de las neuronas, en la fluidez de las membranas, en la supervivencia neuronal y está involucrado en el control de la neurodegeneración. 

Se ha demostrado que el DHA puede acumularse en áreas del cerebro implicadas en los procesos de memoria y atención, como la corteza cerebral y el hipocampo; estudios en animales han demostrado, además, que la deficiencia de DHA en el cerebro tiene efectos críticos en el desarrollo neuronal y comportamental que afectan el aprendizaje, la memoria, la audición y el olfato. A pesar del papel crítico del DHA en la función cerebral, la capacidad de sintetizar DHA es muy limitada en los mamíferos, y solo su consumo a través de la dieta asegura un suministro suficiente para la función neuronal. Pruebas científicas han demostrado que las concentraciones de DHA y AA influyen en el desarrollo neurológico del feto durante el embarazo. 

Y es particularmente importante durante el último trimestre que el feto reciba cantidades adecuadas de DHA, porque es en esta fase de la vida que se desarrolla el 70% de las células cerebrales. Por lo tanto, el consumo materno de ácidos grasos durante el embarazo determina el estado de los ácidos grasos en los recién nacidos al nacer, así como las concentraciones de DHA y AA en las células de la sangre del cordón umbilical están relacionadas con los lípidos consumidos por la madre. 

Se ha sugerido que las cantidades de ácidos grasos poliinsaturados en la sangre del cordón umbilical pueden asociarse con el desarrollo cognitivo: bajas concentraciones de grasas poliinsaturadas en la sangre del cordón umbilical parecen correlacionarse con parto prematuro, bajo peso al nacer y una menor circunferencia craneal del bebé. Como también informa este artículo, publicado en el blog. 

Además, un bajo consumo de pescado graso, la principal fuente de DHA, por parte de la madre durante la gestación se ha asociado con un menor desarrollo cognitivo en la primera infancia y durante la edad adulta. Algunos estudios han investigado la relación entre el consumo de pescado durante el embarazo y el comportamiento en los niños, informando que los pequeños cuyas madres habían comido cantidades adecuadas de pescado graso al inicio de la gestación tenían un riesgo reducido de hiperactividad a la edad de 9 años, en comparación con aquellos cuyas madres no lo habían consumido. 

Un metaanálisis reciente de 9 estudios ha demostrado, además, que los niños con TDAH tienen niveles de omega-3, en particular de DHA en la sangre, inferiores en comparación con los controles.

El DHA mejora la atención en niños de 5 años

El estudio involucró a más de 1000 mujeres mexicanas, algunas de las cuales en el embarazo recibieron suplementos de DHA. Tras 5 años, los investigadores evaluaron las capacidades cognitivas de los niños nacidos de ellas para correlacionar su desarrollo con el consumo de suplementos por parte de las madres. Los resultados mostraron un nivel de atención significativamente mayor en los niños cuyas mamás habían recibido la suplementación de DHA, en comparación con aquellos nacidos de mujeres que no habían consumido los suplementos. No se encontraron, en cambio, diferencias significativas entre los dos grupos de niños en la función cognitiva y el comportamiento en general. 

Este resultado es coherente con los hallazgos de estudios realizados en modelos animales y biológicos que vinculan la concentración de DHA con las funciones de la corteza prefrontal, entre ellas la reactividad y el mantenimiento de la atención. Según los científicos, a menudo los efectos de una nutrición adecuada durante los primeros 1000 días de vida en las características cognitivas no son evidentes hasta que los niños comienzan la escuela, momento en que el comportamiento se relaciona principalmente con el entorno. El significado a largo plazo de los resultados actuales, sobre el impacto de la suplementación materna con DHA en el funcionamiento cognitivo y comportamental durante la etapa escolar, aún está por determinarse. 

Comentando de forma independiente los resultados del estudio, Harry Rice, vicepresidente de la organización para EPA y DHA (GOED), observó que, aunque los datos son interesantes, los investigadores no midieron las concentraciones de DHA en las madres y en los hijos. Esto habría representado una mayor oportunidad para confirmar el papel de los omega-3. 

Considerando, de hecho, que la opinión predominante es que las mayores ventajas de la suplementación conciernen a los individuos con bajo nivel de omega-3, en este estudio hubiera sido interesante saber si la descendencia nacida de madres que habían consumido los suplementos poseía un nivel de DHA más elevado, y si los mejores resultados en las pruebas para determinar el umbral de atención correspondían a los niños con un estado de DHA más alto o no.

Detalles del estudio

El nuevo estudio incluyó a 1.094 mujeres mexicanas embarazadas a las que se les asignó, de forma aleatoria, 400 mg de DHA o un placebo, desde la semana 18/22 de gestación hasta el nacimiento del bebé. 

Cinco años después del tratamiento, los investigadores evaluaron el desarrollo cognitivo y las funciones conductuales y ejecutivas, incluida la atención, en 797 niños (el 82% de 973 nacidos vivos). Estas evaluaciones fueron posibles gracias a pruebas específicas para determinar las habilidades conductuales y las capacidades cognitivas de los niños, teniendo en cuenta también la calidad del entorno doméstico, la inteligencia materna y el estatus socioeconómico.

El DHA favorece la atención

Los datos presentados por la investigación, según los investigadores que la llevaron a cabo, confirman que la exposición prenatal al DHA en forma de suplemento, por parte de las madres, puede contribuir a una mejor atención en los niños en edad preescolar. El estudio, en cambio, no proporcionó pruebas sobre los efectos en niños de mayor edad.

Suplementos Omegor en el embarazo: VitaDHA materna

Entre los diferentes suplementos de Omega-3 producidos por U.G.A. Nutraceuticals, VitaDHA materna está especialmente indicado para favorecer el logro del nivel adecuado de DHA en el periodo periconcepcional, durante el embarazo y la lactancia, favoreciendo la salud de la madre y del bebé. Además de 250 miligramos de DHA, este suplemento contiene 400 miligramos de ácido fólico en su forma altamente biodisponible. Para mantenerte siempre al día con las últimas noticias de la investigación científica sobre los Omega-3, suscríbete a nuestro boletín. 

Fuente: U. Ramakrishnan et al “Prenatal supplementation with DHA improves attention at 5 y of age: a randomized controlled trial”American Journal of Clinical Nutrition