Recién nacidos y niños

Suplementos durante el embarazo: El DHA protege al recién nacido de la deficiencia de hierro y del riesgo de anemia.

La suplementación con omega-3 durante la gestación ayuda a prevenir la anemia por deficiencia de hierro en los recién nacidos, una condición peligrosa para su desarrollo. Según un nuevo estudio, el DHA puede influir en algunos mecanismos bioquímicos alterados en caso de anemia perinatal, facilitando el transporte de hierro a través de la placenta y la absorción por parte del feto, con un impacto beneficioso y duradero sobre el crecimiento neonatal.

Así lo informa un estudio publicado en la revista Journal of Functional Foods, realizado por investigadores de la Universidad de Granada (España) y del King’s College de Londres (Reino Unido).



Anemia por deficiencia de hierro


La deficiencia de hierro es una de las carencias nutricionales más graves e importantes, en particular por la anemia que puede causar. Durante el embarazo, la deficiencia de hierro se asocia con una mayor probabilidad de complicaciones, tanto para la madre como para el bebé, entre ellas un mayor riesgo de hemorragia, sepsis, mortalidad materna y perinatal, y bajo peso del bebé al nacer. Según la Organización Mundial de la Salud, la anemia por deficiencia de hierro durante el embarazo afecta al 40-50% de las mujeres predispuestas y de sus bebés. Diversos estudios han demostrado que las mujeres que consumen poco pescado y mariscos y hacen un gran uso de aceites vegetales, ricos en omega-6, están en riesgo de deficiencia de omega-3. Tanto el hierro como los omega-3 son nutrientes esenciales para el desarrollo normal del feto, al que se transfieren desde la madre. 


Como es sabido, el DHA desempeña un papel importante en el crecimiento y funcionamiento de las neuronas, modulando las propiedades físicas de las membranas biológicas y la transmisión de señales nerviosas. El hierro permite el correcto funcionamiento de numerosas enzimas implicadas en la división celular, la formación de neurotransmisores y el funcionamiento cognitivo. La deficiencia de hierro en las primeras etapas de la vida compromete por tanto el desarrollo cognitivo, motor y del lenguaje. La deficiencia de hierro en los niños está asociada a niveles más bajos de DHA en las células sanguíneas. En algunas investigaciones realizadas en animales, esta condición durante la gestación y la lactancia provoca cambios en la composición de los ácidos grasos de las células del cerebro, el hígado y la sangre de los recién nacidos. Hierro y DHA son por tanto dos de los nutrientes esenciales durante la gestación y el desarrollo del neonato, y ambas moléculas pueden influenciarse entre sí, pero sus interacciones han sido escasamente estudiadas. El objetivo de este estudio fue investigar los efectos de una bebida a base de leche con omega-3, durante el último trimestre, sobre el metabolismo del hierro a nivel placentario.



El DHA facilita el metabolismo del hierro


El estudio, publicado en los últimos meses, fue el primero en establecer un vínculo entre la suplementación materna con DHA y la mejora del metabolismo del hierro en el feto. Para comprender los efectos beneficiosos del DHA sobre la absorción del hierro y su paso por la placenta, los investigadores examinaron los factores y las interacciones que modifican la formación de las proteínas del sistema de transporte de nutrientes, manteniendo el correcto metabolismo del hierro. Los resultados mostraron un efecto beneficioso de la suplementación materna con DHA sobre el metabolismo del hierro a través del trofoblasto, el tejido altamente vascularizado de la placenta que invade la pared del útero y permite la circulación de nutrientes entre el feto y la madre. En particular, el DHA parece contribuir al aumento de la expresión de ciertos genes que regulan el transporte de hierro a través de la placenta. El omega-3 DHA también podría mejorar las reservas de hierro antes del nacimiento y ayudar a prevenir futuras deficiencias postnatales que podrían causar daños en el desarrollo cognitivo del niño.


Detalles del estudio

Para llegar a las conclusiones descritas, los científicos de las universidades de Granada y Londres involucraron a 110 mujeres embarazadas, desde la semana 28 de gestación hasta el nacimiento. Las mujeres fueron divididas al azar en dos grupos: a un grupo se le administraron 400 ml al día (en dos dosis de 200) de leche enriquecida con aceite de atún, que contenía el 26,5% de DHA y el 6,5% de EPA. El grupo de control recibió 400 ml al día de una bebida sin omega-3. La dieta de cada mujer fue evaluada mediante cuestionarios alimentarios específicos.


Los suplementos de aceite de pescado favorecen el desarrollo neonatal


Según los investigadores que llevaron a cabo el estudio, estos resultados sugieren que el cambio en el perfil de los ácidos grasos, posible gracias a la suplementación materna con omega-3, influye y mejora aquellos mecanismos bioquímicos alterados en caso de anemia perinatal, con un impacto beneficioso y duradero sobre el desarrollo del bebé. Como sugirieron Javier Díaz Castro y Julio José Ochoa Herrera, los autores principales de este trabajo, la suplementación materna con DHA puede representar una estrategia nutricional útil no solo en el desarrollo cognitivo y visual del niño, sino también en la prevención del riesgo de anemia. Además, la suplementación podría prevenir las complicaciones relacionadas con la anemia, entre ellas el bajo peso al nacer y el retraso en el desarrollo cognitivo.


VitaDHA Materna: un suplemento perfecto en el embarazo

VitaDHA Materna es un complemento alimenticio, dedicado a la salud de la madre y el bebé, gracias a su contenido de DHA, que contribuye al desarrollo normal del cerebro y la visión del feto, y de ácido fólico, una vitamina importante, entre otras cosas, para la prevención de algunas graves malformaciones congénitas.


Fuente: Javier Diaz-Castro et al. “DHA supplementation: A nutritional strategy to improve prenatal Fe homeostasis and prevent birth outcomes related with Fe-deficiency.” Journal of Functional Foods Volume 19, Part A, December 2015, Pages 385–393