Contaminantes del aire: En ratones, la combinación de omega-3 y vitamina E reduce el daño causado por el polvo fino.
Contaminantes atmosféricos: omega-3 y vitamina E juntos reducen daños en ratones
La combinación de suplementos de omega 3 y vitamina E podría proteger contra los daños cardiovasculares provocados por ciertas sustancias contaminantes presentes en el aire. Un estudio en ratones de laboratorio ha demostrado que ambos nutrientes pueden reducir la inflamación y el estrés oxidativo causados por la respiración de ciertas partículas finas contaminantes, denominadas PM2,5. Los efectos de la administración simultánea de suplementos de vitamina E y omega-3 resultan ser más efectivos que los de las moléculas por separado, mostrando un efecto beneficioso aditivo contra las lesiones inducidas por contaminantes.
Estos son los datos más relevantes de un estudio realizado por investigadores de la Jiao Tong School of Medicine de Shanghái (China), publicados en la revista Chemosphere.
Los efectos de la contaminación atmosférica también se combaten con nutrientes
Numerosos estudios han demostrado que la contaminación del aire puede dañar tanto el sistema respiratorio como el cardiovascular. En particular, un trabajo científico confirmó la asociación entre las partículas finas PM2,5 y un aumento del riesgo de morbilidad y mortalidad cardiovascular. Las partículas finas (o partículas pequeñas) son pequeñas partículas contaminantes, de diversa naturaleza y origen, presentes en el aire.
Entre ellas, las PM2,5, llamadas así por tener un diámetro inferior a 2,5 micrones, pueden ser inhaladas y penetrar en la parte más profunda del sistema respiratorio hasta alcanzar los bronquios y posiblemente los vasos sanguíneos. Estas partículas se consideran el contaminante más dañino del aire; un estudio reciente reportó que la exposición ambiental a las PM2,5 puede inducir respuestas inflamatorias sistémicas agudas de forma autónoma. Aunque el mecanismo que conecta las partículas finas y las enfermedades cardiopulmonares no está claro, algunos estudios han demostrado que la respuesta inflamatoria y el estrés oxidativo pueden ser responsables de los daños causados.
El estrés oxidativo es causado tanto por la producción de moléculas de oxígeno reactivo como por la disminución de aquellas con actividad antioxidante, lo que resulta en daño a componentes celulares como ADN y proteínas. La asociación entre PM2,5 y enfermedades pulmonares, cerebrovasculares, diabetes y enfermedades cardíacas, incluyendo isquemia e infarto de miocardio, ha sido objeto de estudios epidemiológicos y experimentales profundos, impulsando en los últimos años a gobiernos e investigadores a estudiar medidas efectivas para proteger la salud ciudadana.
¿Puede la ingesta adecuada de antioxidantes limitar los daños por contaminación?
Estudios previos encontraron que la vitamina E consumida con los alimentos puede mejorar el metabolismo antioxidante y reducir la oxidación lipídica típica del estrés oxidativo, evidenciando el papel clave de una alimentación correcta para proteger a los individuos contra agentes patógenos externos.
En este sentido, antioxidantes y antiinflamatorios representan estrategias probables para bloquear los efectos dañinos inducidos por la exposición a la contaminación atmosférica. La vitamina E y los ácidos grasos omega-3 están entre las moléculas antioxidantes y antiinflamatorias más saludables para el ser humano. Los omega-3 son conocidos por su capacidad de reducir las reacciones inflamatorias modificando el contenido lipídico de las membranas, mientras que la vitamina E ha demostrado ser efectiva para disminuir las moléculas señalizadoras del daño oxidativo y mejorar las defensas antioxidantes.
La acción combinada de omega-3 y vitamina E contra el estrés oxidativo e inflamación
Aunque varios estudios en humanos indicaron que omega-3 y antioxidantes pueden reducir los daños causados por la contaminación atmosférica, su función protectora aún no se ha aclarado completamente. Por ello, el estudio chino investigó el efecto del tratamiento combinado de vitamina E y omega-3 sobre los daños cardiovasculares causados por las partículas finas, estudiando además la combinación adecuada de ambas moléculas. La investigación se realizó en ratones expuestos a PM2,5 a quienes se les administraron distintas dosis de vitamina E y omega-3, tanto individualmente como conjuntamente.
Tras los tratamientos, los análisis celulares de los animales demostraron que la combinación de suplementos de omega-3 y vitamina E aumentó las actividades de enzimas antioxidantes y redujo los ROS, moléculas responsables del daño oxidativo, así como las moléculas inflamatorias. Finalmente, las membranas celulares estaban menos dañadas en los ratones que consumieron ambos nutrientes, mostrando menores lesiones en el endotelio, el tejido que recubre el interior de los vasos sanguíneos. Además, la acción combinada de omega-3 y vitamina E fue más eficaz que la ejercida por cada molécula por separado.
Algunos detalles del estudio
Durante la investigación, los ratones fueron divididos en 4 grupos: uno recibió suplementos con distintas dosis de vitamina E, otro fue tratado con diferentes dosis de omega-3; un tercer grupo recibió la combinación de vitamina E y omega-3 en dosis bajas, medias y altas; y finalmente un grupo control que no recibió suplementos. Todos los animales siguieron el tratamiento durante 14 días antes de ser expuestos a las partículas contaminantes. Los resultados mostraron que, comparados con las graves lesiones encontradas en las ratas expuestas solo a PM2,5 sin suplementación, los ratones de los grupos pretratados desarrollaron menores daños en el tejido cardíaco. En particular, el tratamiento solo con vitamina E o solo con omega-3 indujo una reducción significativa de las moléculas inflamatorias y un aumento de la actividad antioxidante. Estos efectos fueron mayores en los animales que recibieron la combinación de ambos nutrientes. Además, los efectos protectores de vitamina E y omega-3 mostraron una respuesta dependiente de la dosis.
Se necesitarán más estudios para confirmar los efectos en humanos
La suplementación con vitamina E y omega-3 resultó ser una combinación potente contra las lesiones cardiovasculares inducidas por la contaminación atmosférica en ratas, sugiriendo que ambos nutrientes son capaces de limitar el estrés oxidativo y la respuesta inflamatoria causada por PM2,5, produciendo efectos más efectivos que cuando se administran por separado. Según los investigadores, los resultados sugieren un efecto protector contra lesiones por contaminantes ambientales mediante una adecuada ingesta dietética de nutrientes.
Estas observaciones deberán profundizarse, ya que los propios autores del estudio reconocen que, aunque la dosificación de los nutrientes se calculó estrictamente según las tasas de ingesta y absorción alimentaria en humanos, las modalidades de administración no representan completamente el consumo habitual de alimentos en humanos.
Fuente: Xihao Du, Shuo Jiang et al. “Combined effects of vitamin E and omega-3 fatty acids on protecting ambient PM2.5-induced cardiovascular injury in rats”, Chemosphere.



