Los omega-3 previenen complicaciones de la cirugía ocular con láser
Láser ocular: el aceite de pescado previene las complicaciones de la intervención
La intervención láser en los ojos para corregir defectos de la córnea puede dañar los nervios. El tratamiento con Omega 3 puede prevenir consecuencias desagradables adicionales. Jiucheng He y Haydee Bazan, expertos del Louisiana State University Health Sciences Center de Nueva Orleans (Estados Unidos), explican el papel protector de estos nutrientes: en particular del Omega-3 DHA (ácido docosahexaenoico). Los 2 investigadores explicaron que esta propiedad convierte al DHA en un posible remedio contra una de las complicaciones más comunes de la intervención: el síndrome del ojo seco o hipolacrimia. La información científica fue publicada en las páginas de la revista Prostaglandins, Leukotrienes, and Essential Fatty Acids.
Láser en la córnea: ¿cuáles son los riesgos?
La córnea es un tejido transparente presente en la superficie del ojo que protege las estructuras internas, transmite y refracta la luz. El film lagrimal se distribuye sobre su superficie. En su interior también están presentes grasas que reducen la evaporación de las lágrimas y permiten su disposición uniforme. Entre ellas se incluye también el Omega-3 ALA (ácido alfa-linolénico). Las intervenciones quirúrgicas láser para remodelar la córnea pueden dañar parte de las fibras nerviosas asociadas a ella. Además de comprometer la sensibilidad de la córnea, este daño puede reducir la producción de lágrimas. La consecuencia más común de esta situación es el síndrome del ojo seco, caracterizado por:
- molestias oculares y visuales
- inflamación
- daño en la superficie del ojo
Omega-3 para una córnea perfecta
Diversos estudios sugieren que este síndrome puede prevenirse prestando atención a la cantidad y tipo de grasas ingeridas con la alimentación:
- las mujeres que consumen grandes cantidades de Omega-3 reducen en un 20% la probabilidad de sufrir ojo seco;
- una proporción desequilibrada de ácidos grasos Omega-6 y Omega-3 a favor de los primeros aumenta el riesgo de desarrollarlo.
El papel protector de los Omega-3 se demostró mediante la administración a algunos animales de una mezcla de ácido gamma-linolénico y Omega-3 EPA y DHA (ácido eicosapentaenoico y docosahexaenoico).
Los Omega-3 reducen los daños en la córnea
Los investigadores fueron más allá del aspecto preventivo. Demostraron que la aplicación tópica (superficial, sin ingestión ni inyección) del Omega-3 ALA permite reducir los daños en la córnea y los síntomas de la inflamación. Para los científicos, este efecto estaría mediado por las moléculas producidas por el organismo a partir del ALA: EPA, DHA y sus derivados, conocidos por sus propiedades antiinflamatorias. De hecho, estudios adicionales realizados en ratones demostraron que los derivados del EPA tienen justamente este efecto.
Una ayuda tras la intervención láser
Sobre la base de estos resultados, los científicos experimentaron en conejos la eficacia del tratamiento con DHA en la regeneración de los nervios asociados a la córnea tras la intervención láser. Utilizado en combinación con diversos factores de crecimiento, este Omega-3 favorece la regeneración de los nervios y la recuperación de la sensibilidad de la córnea2, previene el síndrome del ojo seco y otras posibles complicaciones de la operación. Los Omega-3 podrían constituir por tanto la nueva frontera en la prevención de las consecuencias de daños a los nervios asociados a la córnea causados por el láser.
Fuente:
1. He J, Bazan HE, “Omega-3 fatty acids in dry eye and corneal nerve regeneration after refractive surgery”, Prostaglandins Leukot Essent Fatty Acids. 2010 Apr-Jun;82(4-6):319-25. Epub 2010 Mar 3.
2. Cortina MS, He J, Li N, Bazan NG, Bazan HE, “Recovery of corneal sensitivity, calcitonin gene-related peptide-positive nerves, and increased wound healing induced by pigment epithelial-derived factor plus docosahexaenoic acid after experimental surgery”, Arch Ophthalmol. 2012 Jan;130(1):76-83. Epub 2011 Sep 12.



