El aceite de pescado omega-3 ayuda a curar las úlceras por presión

Úlceras por decúbito: los omega-3 pueden curarlas

La ingesta de aceite de pescado rico en omega-3 favorece la curación de las úlceras por decúbito que afectan a los pacientes obligados a pasar largos períodos sentados o acostados en la misma posición. El efecto es tal que mejora el estado de las heridas hasta en un 25% y permite disminuir tanto los dolores con los que debe convivir quien presenta estas lesiones como el riesgo de eventuales infecciones. Estas potencialidades del aceite de pescado fueron descubiertas por un grupo de expertos israelíes coordinado por Pierre Singer, docente en la Sackler Faculty of Medicine de la Universidad de Tel Aviv, cuyos estudios fueron publicados en el American Journal of Critical Care.

Úlceras y llagas, un problema de falta de oxígeno

Las úlceras y las llagas por decúbito son un problema frecuente para quienes, a causa de una enfermedad (especialmente si es grave), deben permanecer mucho tiempo en la misma posición, acostados en una cama o sentados. Además de provocar dolores, las llagas y úlceras se infectan fácilmente y por ello deben ser tratadas adecuadamente. Entre las causas de su formación se encuentran tanto la humedad de la piel como un reducido flujo sanguíneo en la zona afectada, donde los tejidos se encuentran en una situación de falta de oxígeno.

8 gramos de aceite de pescado en 3 semanas

Basándose en los resultados de estudios previos que habían demostrado la capacidad del aceite de pescado para aumentar los niveles de oxígeno en los tejidos de pacientes gravemente enfermos, Singer y sus colegas pensaron en probar si este suplemento alimenticio también era útil para promover la curación de las úlceras por decúbito. Para verificar esta potencialidad de un suplemento de aceite de pescado rico en omega-3, el equipo de expertos involucró en el estudio a 40 pacientes ingresados en cuidados intensivos que ya presentaban úlceras preocupantes en el cuerpo. 

A la mitad de los participantes se les asignó la dieta clásica ofrecida por el hospital, mientras que la otra mitad recibió el mismo menú enriquecido con 8 gramos diarios de aceite de pescado. A las tres semanas del inicio del experimento, los expertos evaluaron mediante una escala específica el dolor asociado a las úlceras por decúbito, constatando que la ingesta del suplemento de omega-3 reduce dolores y molestias en un 20-25%. No solo eso, ya en los primeros 14 días los niveles de inflamación en el organismo de los pacientes que estaban tomando aceite de pescado disminuyeron significativamente, mientras que su sistema inmunitario resultó más eficiente. En particular, Singer y sus colegas observaron una reducción de los niveles en sangre de la proteína C-reactiva, una molécula asociada a la inflamación, a las infecciones (tanto virales como bacterianas), a enfermedades reumáticas, a daños en los tejidos y a la necrosis, la muerte prematura de las células.

Glóbulos blancos y omega 3

Según Singer, el efecto beneficioso del aceite de pescado podría depender de los cambios detectados en los niveles de las moléculas que permiten a los leucocitos, un tipo específico de glóbulos blancos, alcanzar la herida. Sea cual sea el mecanismo activado, estos primeros resultados son alentadores tanto en términos de curación de las heridas como de reducción de la inflamación. Para estar siempre al día con las últimas noticias de la investigación científica sobre los Omega-3 suscríbete a nuestra newsletter.

Fuente Theilla M, Schwartz B, Cohen J, Shapiro H, Anbar R, Singer P, “Impact of a nutritional formula enriched in fish oil and micronutrients on pressure ulcers in critical care patients”, Am J Crit Care. 2012 Jul;21(4):e102-9