El riesgo de insuficiencia cardíaca aumenta en ancianos con deficiencia de vitamina D

El riesgo de insuficiencia cardíaca es 12 veces mayor en los ancianos con deficiencia de vitamina D, en comparación con aquellos con concentraciones adecuadas. Un nivel bajo de la vitamina representa, de hecho, un factor de riesgo para la insuficiencia cardíaca más alto que la obesidad o la arritmia. La suplementación con vitamina D podría, por lo tanto, representar en el futuro una estrategia eficaz y económica para la prevención de algunos trastornos cardíacos.

Así lo descubrieron los investigadores de la Universidad de Pernambuco, en Recife, Brasil. Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista especializada ESC Heart Failure.

La insuficiencia cardíaca es un problema común en la tercera edad 

La insuficiencia cardíaca, o fallo cardíaco, es una condición en la cual el corazón no logra bombear una cantidad suficiente de sangre a todos los tejidos y órganos del cuerpo, debido a un debilitamiento del tejido del miocardio. Las consecuencias y los síntomas de esta condición son diversos e incluyen falta de aliento con esfuerzo físico, dificultad para respirar en posición supina, tos, abdomen hinchado y estado de confusión. La insuficiencia cardíaca es muy común y representa un importante problema de salud pública, siendo una de las principales causas de hospitalización entre los ancianos. Con el avance de la edad, el miocardio sufre alteraciones en su composición y por lo tanto en su funcionalidad. Entre los factores de riesgo asociados al fallo cardíaco se encuentran:

• la edad avanzada
• el género masculino
• la diabetes mellitus
• el infarto de miocardio agudo
• la hipertensión

Existen fuertes evidencias, en la literatura científica, sobre la asociación entre la deficiencia de vitamina D y el riesgo de insuficiencia cardíaca, así como sobre las funciones de la vitamina D en el metabolismo cardiovascular. Por ejemplo, el estudio prospectivo “LURIC”, realizado sobre 3299 pacientes con enfermedad cardiovascular, encontró una alta prevalencia de disfunción del miocardio asociada a una deficiencia grave de vitamina D. 

Una investigación reciente realizada por investigadores de los Teaching Hospitals de Leeds en 163 pacientes con insuficiencia cardíaca, demostró que los suplementos de vitamina D pueden mejorar la capacidad del corazón para bombear sangre a todo el cuerpo. Como se sabe, además de obtener vitamina D de ciertos alimentos, el cuerpo humano puede producirla gracias a una serie de reacciones que comienzan con la acción de la luz solar sobre la piel. En algunos países, por lo tanto, especialmente durante los meses de invierno, la deficiencia de vitamina D es más frecuente. Esta condición es muy común en personas mayores de 60 años. 

Las personas ancianas, de hecho, difícilmente siguen una alimentación adecuada, suelen tener un mal funcionamiento intestinal y una exposición limitada a la luz solar. Por estas razones, a menudo no alcanzan el nivel mínimo recomendado (30 ng/mL) de 25-hidroxivitamina D, la forma inactiva de la vitamina D que se mide en la sangre. 

Insuficiencia cardíaca: más probable cuando hay deficiencia de vitamina D   

Según el nuevo estudio, que relacionó la insuficiencia cardíaca en ancianos brasileños con diferentes factores de riesgo, la probabilidad de insuficiencia cardíaca afectaba a más de la mitad de los ancianos seleccionados y estaba fuertemente asociada a la falta de vitamina D. En detalle, los resultados revelaron que el riesgo de insuficiencia cardíaca era 12 veces mayor en los ancianos con poca vitamina D en sangre, en comparación con aquellos con un estado adecuado, y que este nuevo factor aumentaba la probabilidad del trastorno cardíaco más que la obesidad o la arritmia. Según los investigadores que realizaron el estudio, sin embargo, se necesitan más investigaciones para evaluar un posible papel de los suplementos de vitamina D en la prevención de enfermedades cardíacas en ancianos. En cualquier caso, basándose en las pruebas obtenidas, respaldadas por un gran número de otras investigaciones, el alto porcentaje de personas mayores con deficiencia de  vitamina D y las consecuencias sobre el riesgo de insuficiencia cardíaca sugieren la necesidad de establecer recomendaciones sobre la dosificación de la vitamina, necesaria para mantener el corazón en buen estado de salud. 

Los detalles del estudio 

Entre agosto de 2015 y febrero de 2016, los investigadores recopilaron los datos clínicos de 137 ancianos brasileños sometidos a evaluaciones cardiológicas de rutina. El umbral de adecuación de la vitamina D, medido como 25-hidroxivitamina D, en este estudio fue establecido como inferior a 30 nanogramos por mililitro de sangre. Para analizar la asociación entre la deficiencia de la vitamina y el riesgo de insuficiencia cardíaca, los investigadores utilizaron análisis estadísticos específicos. 

De la recopilación de los datos se observó que la mayoría de los ancianos involucrados tenía sobrepeso u obesidad, con una alta relación cintura-cadera, y con una alta prevalencia de dislipidemia e hipertensión. Además, el 91,2% de los sujetos era hipertenso, el 35% padecía enfermedad coronaria y el 27,7% tenía arritmia cardíaca. Nada menos que el 62% de los sujetos incluidos en el estudio mostró una deficiencia de 25-hidroxivitamina D y entre ellos, el 78,7% presentaba un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca. 

De los resultados del análisis estadístico surgió, por tanto, que entre quienes sufrían deficiencia de vitamina D, la probabilidad de insuficiencia cardíaca era 12,2 veces mayor en comparación con quienes tenían niveles normales de la vitamina. Los hombres resultaron ser más predispuestos a la insuficiencia cardíaca, y el riesgo se asoció, aunque en menor medida respecto a la deficiencia de 25-hidroxivitamina D, también a la obesidad y a la arritmia. 

¿Suplementación con vitamina D? Los efectos serán confirmados por otras investigaciones.

Gracias a los resultados obtenidos, los científicos encontraron un alto porcentaje de ancianos con deficiencia de 25-hidroxivitamina D, y una fuerte asociación entre este déficit nutricional y el aumento del riesgo de insuficiencia cardíaca. Los investigadores no pudieron establecer si la falta de vitamina D es la verdadera causa de la patología, o no. Sin embargo, sugirieron que un menor riesgo de insuficiencia cardíaca podría derivarse de la capacidad de la vitamina para suprimir la respuesta inflamatoria, un factor importante en la patogénesis de la insuficiencia cardíaca. Por estas razones, y considerando el bajo coste de una eventual suplementación, los científicos que realizaron el estudio han planteado la posibilidad de prevenir y tratar algunas disfunciones cardíacas con suplementos de vitamina D, si futuros estudios confirman su eficacia. 

Fuente: Magalhães Porto et al., “Association between vitamin D deficiency and heart failure risk in the elderly”. ESC Heart Failure 2018 Feb; 5(1): 63–74.