El EPA y el DHA ayudan a reducir el riesgo de diabetes tipo 2
Diabetes tipo 2: los Omega-3 EPA y DHA reducen sus riesgos
Los omega 3 parecen proteger del diabetes tipo 2 a los sujetos con altos niveles de ácidos grasos libres, que en cambio favorecen la aparición de la patología. En particular, un alto Índice de omega-3 —el porcentaje de EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexaenoico) respecto a los ácidos grasos totales en las membranas de los glóbulos rojos— está asociado a un menor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Estos son los resultados de un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Minnesota (EE.UU.) y publicado en la revista Diabetes Care.
NEFA: un factor de riesgo diabético
Los ácidos grasos libres circulantes, conocidos también como ácidos grasos no esterificados (NEFA), representan una fuente de energía para el organismo. Son liberados en el torrente sanguíneo por la enzima lipasa, presente en los vasos sanguíneos, músculos y células adiposas. Una concentración de NEFA crónicamente elevada, sin embargo, puede tener consecuencias patológicas en sujetos obesos o diabéticos y representar un factor predisponente a la muerte súbita. Algunos estudios han sugerido que los NEFA pueden aumentar el riesgo de diabetes tipo 2, una forma de diabetes muy común. La patología aparece en la edad adulta y se caracteriza por un doble defecto: la baja producción de insulina o una respuesta inadecuada del organismo a la insulina producida.
Los omega-3 atenúan la acción de los NEFA
El objetivo del estudio fue examinar la relación entre los altos niveles de NEFA y el riesgo de diabetes tipo 2, y probar la posible acción de los omega-3 sobre esta relación. Los investigadores midieron las concentraciones, en ayunas, de NEFA en 5.697 sujetos, todos participantes de un estudio multiétnico sobre la aterosclerosis (MESA) durante un período de aproximadamente 11 años. Los valores obtenidos demostraron una mayor incidencia de diabetes en los sujetos con concentraciones más altas de NEFA. Los investigadores luego identificaron una interacción significativa de los omega-3 en la relación entre NEFA y diabetes tipo 2. Los individuos con niveles bajos de ácidos grasos poliinsaturados mostraban, de hecho, un mayor riesgo de diabetes en comparación con quienes tenían concentraciones más altas. Aquellos con deficiencia de EPA y DHA mostraban un Índice de omega-3 del 3,9%, mientras que los que tenían una concentración media-alta, del 7,5%. Este último grupo fue el que evidenció mayores beneficios, en línea con los estudios que sugieren que un Índice de omega-3 del 8% se asocia a un menor riesgo cardiovascular; a pesar de que la mayoría de la población, que no toma suplementos de EPA y DHA, tiene un Índice del 3-5%.
¿Pueden los Omega-3 actuar sobre disfunciones metabólicas?
Según los investigadores, los resultados obtenidos, además de confirmar el papel de los NEFA como indicador de diabetes tipo 2, sugerirían el efecto protector de los omega-3 frente a la patología. Los autores de la investigación plantean entonces que el aumento de EPA y DHA en la sangre podría desempeñar un papel importante para un envejecimiento saludable, aunque la acción de los omega-3 frente a las disfunciones metabólicas relacionadas con los NEFA requiere aún de estudios adicionales.
Fuente: Steffen BT, Steffen LM, Zhou Z, Ouyang P, Weir NL, Tsai MY. n-3 fatty acids attenuate the risk of diabetes associated with elevated serum non-esterified fatty acids: the Multi-Ethnic Study of Atherosclerosis. 2015 Diab Care doi: 10.2337/dc14-1919



